La música se concibe como una
ciencia puesto que experimenta, descubre, mide y observa como el resto de
ciencias. Establece relaciones con la educación, la pedagogía, la psicología,
la sociología, con las humanidades, la física, las matemáticas, con la
estructuración y la organización sistémica, con las Bellas Artes y las Ciencias
de la Comunicación. Las relaciones que la música establece con todas estas
disciplinas resulta muy beneficioso para el desarrollo de áreas como la
creatividad, la expresión corporal y plástica…
Para aproximarnos al proyecto científico
de la música, es necesario tratar los fundamentos científicos de este, para
comprender cuál es su alcance y sentido como una disciplina científica. Cuatro
son los fundamentos científicos:
- Etimológica y semántica, con la finalidad de limitar el significado de su término.
- Epistemológica, tiene como finalidad la delimitación de sus fronteras científicas y saber que abarca su conocimiento.
- Histórica, a través de la cual podemos observar su fenómeno con el que podremos comprender y analizar su evolución.
- Teórica, para poder establecer el marco de referencia teórico que los estudios musicales han aportado sobre su conocimiento.
La música además de ser ciencia, también es lenguaje porque se realiza como un proceso de comunicación ya que su naturaleza lo implica. Además de ser ciencia y lenguaje, como también sabemos, es arte.
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